Durante el periodo en que la razón se vio afectada por diversas posturas filosóficas a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, la literatura se vio impregnada de esas crisis; por lo que en las obras pertenecientes a esa época se ve reflejada la situación en la que se encontraba el pensamiento del hombre así como su forma de actuar.
Las tres posturas que más se hacen notar son el Racionalismo, el Vitalismo y el Nihilismo.
Primeramente en lo que concierne al Racionalismo planteado durante la época, lo podemos ver claramente reflejado en los cuentos de Edgar Allan Poe, específicamente hablando del “El Barril Amontillado”; esta historia en la que se plantea la forma en la que un individuo se deshace de otro encerrándolo dentro de unas catacumbas y dejándolo ahí hasta que muere, como venganza a las ofensas que le hizo. Esta cuento nos muestras varias características de cómo el racionalismo influyo en la literatura, primeramente se puede notar lo que plantea el racionalismo, es decir, el hecho de que la razón despierte una lógica dentro del individuo nos permite darnos cuenta de que toda acción que el individuo lleve a cabo tiene una reacción o consecuencia, dependiendo de cómo actúe ya sea bien o mal.
En el caso de “El Barril Amontillado” la forma de actuar del personaje (Fortunato) es incorrecta (ofensiva) de ahí que el personaje principal tenga esa reacción, es decir, en base a lo hecho por el personaje se desprende una reacción o castigo hacia lo que hizo, el cual no necesariamente es por parte de la ley, sino que el personaje principal hace una especie de justicia por su propia mano, y decide castigar la falta del ofensor o deshacerse de ese “mal” que tanto le afecta a el y tal vez a los demás.
También se puede notar como es que se maneja cierta subjetividad en la historia, se hace referencia a cosas opuestas y que pueden ser consideradas ajenas al racionalismo, el cual trata de explicar el mundo a través de la razón, es decir se manejan aspectos “oscuros” del ser humano como lo seria el caso de esa lucha entre el bien y el mal, la corrupción, la venganza, etc; los cuales lo lleven a actuar de determinada manera.
Con respecto al Vitalismo, esa postura en la que la se tiene una perspectiva diferente de la vida, en la cual lo no basta con conocer la realidad (la vida) mediante el empleo del razonamiento (lógica del individuo) sino que se enfoca en emplear la vivencia, así como la intuición que mas que hacer razonar al individuo se enfoca en tener experiencias con las cosas, tomando relevancia únicamente lo que nos esforcemos por alcanzar, los logros que obtengamos. Todo esto claramente se ve reflejado en los poemas de Ander Breton, como por ejemplo en su poema “El Marques De Sade” o “Del Aire Del Agua 1934”; en los cuales se puede observar la forma en la que los elementos presentes (las historias, las vivencias, la irracionalidad que se puede llegar a percibir, los cambios, el valor de determinadas acciones, etc.) se prestan para que cada individuo pueda obtener una significación única y personal, que puede estar basada en la vivencias de los sujetos.
Como parte de esa vivencia empleada se puede ver como se cae en una mayor subjetividad que puede llegar a ocasionar una confusión debido a que se considera el concepto de vida de la manera más amplia posible para así poder dar una explicación del mundo que rodea al hombre y al mismo tiempo tratar de dar un importancia y sentido a las cosas y la vida misma, todo lo contrario al racionalismo que se enfoca mucho más a un aspecto objetivo.
Por ultimo, en lo que se refiere al Nihilismo su presencia en la literatura es mucho más fácil de percibir debido a lo que plantea la postura, esa negación de la realidad, en donde se afirma que nada existe, que nada puede ser conocido, es decir, incorporando un aire pesimista con respecto a la vida, una actitud de pesadumbre; en la cual la voluntad merma, la esencia de la vida se pierde o disminuye; cayendo de esa manera en la decadencia.
Todo esto se puede ver reflejado mas claramente en los poemas de Charles Baudelaire como por ejemplo en “La Destrucción” o “La Plegaria De Un Pagano”; observándose claramente una determinada apatía la cual para algunos puede estar presente desde el titulo, así como la indiferencia, también podría llegar a percibirse aspectos como el egoísmo, la derrota, el desenfreno e incluso la violencia.
Cada uno de estos elementos plasmados en los poemas de Baudelaire nos permite percatarnos de esa pasividad en la que se encuentran sumidos los nihilistas, en la cual la indiferencia por los otros es lo único que domina la existencia, la vida de cada sujeto; De ahí que en los poemas tal vez no se persiga una finalidad clara o definida sino que solo se muestre esa negación de la realidad o la verdad, así como la la existencia de alguna finalidad.
